Los participantes pueden construir proyectos temáticos, redes profesionales y de equipos locales. Los participantes pueden ser llevados a trabajar en un mismo medio social o profesional bajo la forma de una red socioprofesional. De la misma manera, pueden conformar grupos de trabajo o proyectos temáticos sobre ciertas problemáticas identificadas en las asambleas. En los hechos, también es esencial constituir equipos de trabajo locales con base en un país o zona geográfica determinada. De este modo, las asambleas están compuestas por un gran número de participantes conectados entre sí en forma de equipos locales, alianzas o redes.
Aceptar las reglas de un diálogo auténtico
La pertenencia a un medio no debe ser un freno o límite para el debate. Por ejemplo, es mucho más importante explorar su experiencia y compartirla con otros participantes que venir a representar o ser el portavoz de una corporación o institución. Lo esencial es esto: movilizar, mancomunar, en la escucha y en la convivencia, lo mejor de la experiencia de cada uno, experiencia ésta que proviene por cierto de una institución o de una organización, pero sin estar forzosamente circunscripta o limitada por ella.
Compartir su experiencia y apoyar las asambleas
Todos los participantes aceptan compartir su experiencia. Se comprometen, a través del debate y de la acción conjunta, a contribuir con los objetivos de las asambleas ciudadanas y a mancomunar su punto de vista y su análisis con los otros participantes. Cada uno puede también contribuir a la promoción y al desarrollo de la asamblea compartiendo sus contactos y las informaciones útiles, brindando sus recursos intelectuales, su tiempo y sus saberes prácticos.