¿Otro Irán más allá de las explicaciones binarias? - transcripción de la entrevista video
Es una noción muy muy importante lo que significa el vacío social, es decir en una especie de anomia donde la falta de sentimiento de pertenencia a una comunidad se define como el vacío social ; pero lo digo también respecto del régimen, que como se dice es un régimen totalitario, que no deja espacio de libertad y de autonomía a los individuos, por ende a los ciudadanos, y hay que saber también que cuando uno mira un programa de televisión por ejemplo, comienza con algunas recetas del Corán y que incluso cuando se cocina, al dar una receta de cocina, hay que pasar por una referencia al Corán o a algo de religión, y esto crea cierta pesadez, una seriedad entre comillas bastante molesta, lo cual explica también esa gran dicotomía y esa gran oposición entre la vida en el exterior y en el interior de la sociedad iraní, es decir donde la población encuentra más libertad en el interior que en el exterior, y por compensación hay incluso una exageración de poder expresarse en el ámbito interno.
Pero, al mismo tiempo, cuando digo en estos días que no todo es blanco o negro, hay que saber también que las jóvenes generaciones que tienen entre veinte y treinta años, que crecieron bajo el régimen, escapan justamente a esta ideologización del discurso político como en el caso de las mujeres. Entre estas jóvenes generaciones hay muchas mujeres y muchachas con un alto nivel de escolaridad, a punto tal que ahora el régimen ha implementado un sistema de cupos para poder impedir que las jóvenes accedan a los estudios universitarios, y este formidable auge –como digo, de la sociedad civil, es lo que hace que en mi opinión se pueda hablar de otro Irán que existe, que desgraciadamente no está suficientemente relatado en los medios de Occidente, es decir sólo se habla o bien del régimen o por ejemplo de la cuestión de la crisis nuclear. Hace algunos años que relatar la crisis nuclear se hace en detrimento de lo que ocurre con la sociedad civil en Irán …
Un formidable auge de la sociedad civil
Este auge se define también por el surgimiento de un formidable movimiento de lo que se ha dado en llamar las ONG, porque hay que saber que, a falta de actividades sindicales, de partidos políticos y de formas de asociación, el surgimiento de las ONG era también una alternativa y una respuesta por parte de la sociedad civil para crear formas de actividad de ciudadanía.
Es cierto que en general fue primero el movimiento de las mujeres y sobre todo el movimiento de defensa del medio ambiente, en todas sus formas. Además cuando se dice mujeres, hay muchas mujeres que son activas de manera verdaderamente intergeneracional, por ejemplo jóvenes, adolescentes. Encontré por ejemplo iniciativas en una pequeña ciudad. Van al parque todos los viernes a alentar a la gente a recolectar los tachos de basura, y esos mismos jóvenes han tomado contacto con los empresarios de la localidad y dicen “vamos a regalar una heladera o una radio a quien recolecte más tachos de basura”. Este tipo de iniciativas existen, por ejemplo también, cómo limpiar la montaña, y hay muchos movimientos alrededor de esos desafíos del medio ambiente, de la ecología en general porque, como no es una expresión política, es una forma de actividad que reemplaza o responde a ese mito social que existe y al cual al régimen quizás le cueste más condenar este género de actividad para el medio ambiente que una actividad política propiamente dicha o de expresión libre.
Otras formas de movimiento son los movimientos de mujeres. El más conocido se llama la « Campaña para un millón de firmas » y comenzó hace más o menos 5 años : un grupo de mujeres decidió hacer puerta a puerta un petitorio contra las leyes misóginas de la constitución de la República islámica. Evidentemente esto se tradujo en muchos arrestos y persecusiones de las mujeres de este movimiento, pero esto comenzó a tomar auge y se está desarrollando.
Hay también un reconocimiento internacional, recientemente, hace más o menos dos meses, creo que fue en el mes de febrero pasado, se otorgó un premio colectivo, el premio Simone de Beauvoir en Francia, a este movimiento.
Nueva relación con las ideologías
Para caracterizar un poco o encontrar características generales de la situación en Irán, se podría quizá señalar el carácter ideológico del régimen, y cuando digo esto me refiero al carácter ideológico de todo lo que también era relacionado con mi generación por oposición a lo que ocurre con la juventud actual en Irán, donde hay una gran desconfianza con respecto a todo tipo de ideología.
En el auge de las iniciativas de la sociedad civil hay algo desideologizado y por lo tanto se toma en consideración lo que quiere decir la ciudadanía. Porque hay que saber también que respecto de la naturaleza de los regímenes que no querían reconocer ni la noción de nación ni la de ciudadanía, porque era “umma”, es decir que pertenecía a la religión, esta desconfianza frente a la ideología genera como contrapartida un respeto y un deseo de sentirse perteneciente a una comunidad mucho más próxima de la noción de ciudadanía como la entendemos hoy que de la forma tradicional.
Lo que la juventud actual y también el movimiento de las mujeres tratan de privilegiar son justamente formas de alternativa mucho más distantes respecto de las ideologías tradicionales que existían por ejemplo en los años 60, 70 e incluso en la época del Sha, donde hay un deseo de participar en la vida ciudadana sin referirse a una ideología y por lo tanto es también una brecha, una oposición respecto de la definición del régimen, que define una cierta forma de pertenencia a la religión como el único rasgo de pertenencia y de adhesión, digamos, de la sociedad iraní.