He aquí algunas noticias “frescas” inmediatamente posteriores a la
Asamblea Ciudadana de Asia .
La Asamblea se desarrolló muy bien. John garantizó realmente todo.
Montó un formidable equipo integrado por jóvenes de entre 20 y 30 años
procedentes de todas partes del mundo. Una de las ideas geniales de
John fue la de organizar un campamento internacional de jóvenes justo
un mes antes de la Asamblea para construir tres casas junto a los
habitantes de un pueblo, a beneficio de los pobladores más
necesitados. El grupo construyó entonces, junto a algunos albañiles
del pueblo, esas tres casas destinadas a tres mujeres madres de
familias numerosas. Esa experiencia de vida compartida consolidó al
grupo. Sus integrantes se hicieron amigos…y luego asumieron la
organización de la Asamblea.
Hubo alrededor de doscientos participantes. En el caso de la Asamblea
asiática, el desafío consistía en lograr que vinieran delegaciones de
múltiples y muy diversos países del continente. Ese desafío se logró
claramente: hubo grupos procedentes de China, Corea del Sur, Sri
Lanka, Nepal, Irán, Afganistán, Malasia, Filipinas, Indonesia e India.
También hubo una docena de delegados provenientes de diversas regiones
de esos países del continente. Y había gente de Bangalore, por
supuesto.
Uno de los rasgos particulares de esta asamblea fue que cerca del 80%
de los participantes fueron jóvenes de entre 20 y 30 años. Esto
obedece claramente al hecho de que John fue la pieza clave del proceso
y que su asociación Global Citizens for Sustainable Development fue el grupo organizador. Otra buena jugada que encontró John fue la de organizar,
dos días antes del inicio, una primera Asamblea de Jóvenes. De ese
modo, los jóvenes venían ya un paso adelante.
Otra característica fuerte de la Asamblea Asiática fue que cerca del
60% de los participantes eran mujeres. Esto se explica porque los
participantes que vinieron de China y de Corea del Sur eran jóvenes
mujeres en su mayoría. Pero también observé que la presencia de
mujeres era muy fuerte en las delegaciones de India, Filipinas,
Malasia e Indonesia. La delegación iraní estaba mejor distribuida: 4
mujeres y 3 hombres, con dos mujeres como voceras del grupo.
En lo que respecta a la participación de los distintos grupos
socioprofesionales, los estudiantes fueron netamente mayoritarios.
Otros dos grupos con una presencia importante fueron: los habitantes,
gracias a la movilización de la Alianza Internacional de Habitantes, y
las organizaciones campesinas, gracias a la presencia de grupos
provenientes de las comunidades de las regiones forestales. También
hubo universitarios, responsables religiosos, funcionarios, organismos
estatales, y una notable presencia de los artistas. Otra idea genial
coordinada por John y su equipo fue la de apoyar la asamblea sobre lo
que han dado en llamar “la Caravana artística de la Ruta de la Seda”.
Cada mañana, entonces, teníamos una primera sesión que comenzaba con
presentaciones artísticas y cada noche, a partir de las 18 horas,
actividades de teatro, baile, canto, hip hop, caligrafía china,
origami, etc. Yo no quise interferir, pero el pedido de la gente fue
tan fuerte y agradable que no pude resistirme al placer de cantar al
final “Cucurrucucú Paloma” y “Cambia Todo Cambia” junto a un joven
guitarrista. La banda de tamborileros de Bangalore nos hizo vibrar
hasta los tobillos.
En cuanto al contenido, la clave de la Asamblea fue trabajar desde el
comienzo sobre un conjunto temático amplio y coherente. John ya nos
había hablado de las “5 E”: Ética, Educación, Economía, Equidad,
Ecología. Se conservó ese marco hasta el final. Lo esencial del
trabajo se hizo en grupos dentro de los talleres. Sólo hubo dos
plenarios, al comienzo y al final, y un tercero coordinado en la mitad
sobre un tema sensible en la región: “les religiones y la gobernanza”.
Lo esencial se desarrolló en talleres de 30 a 40 personas.
Ben Quinones – que estaba con nosotros en la reunión de París - había
propuesto una metodología simple y eficaz a la vez: sobre cada una de
las cinco “E” había dos preguntas clave: ¿cuál es su visión para
Asia?, ¿Cuál es su misión para Asia?, planteadas a nivel personal y a
nivel colectivo. No pasamos entonces demasiado tiempo analizando los
problemas de la región, sino que intentamos más bien hacer hincapié en
la visión de futuro, siendo conscientes al mismo tiempo de los
problemas (de educación, de ecología, etc.) y, sobre todo, de lo que cada uno hace y hará para superarlos a nivel personal y colectivo.
Para el plenario final y el informe de cada taller (se habían
presentado dos responsables en cada taller), tuvimos la idea de
organizar una suerte de Feria de Ideas y Propuestas, para evitar las
presentaciones largas y aburridas en forma de lectura de informe de
los talleres. Cada taller “expuso” pues lo que había hecho durante las
dos jornadas precedentes, explicando a los “paseantes” sus visiones y
sus misiones. Tenía uno la sensación de estar en una verdadera feria o
en un mercado, pero de ideas, de experiencias compartidas y sobre todo
de propuestas. La gente hablaba, hacía preguntas, copiaba las notas o
informes de los talleres, se sacaba fotos con los facilitadores y los
voceros. En otras palabras, en lugar de buscar un solo informe de
síntesis final total y perfecta se optó por interacciones humanas
donde cada participante intentó construir una visión apropiada del
contenido de la Asamblea. Es decir que en vez de hacer mapas temáticos
con un ordenador, cada participante y su grupo construyeron su propio
mapa conceptual. Tal vez sea difícil de explicar, pero esta idea de
Mercado de Ideas fue una iniciativa estupenda desde el punto de vista
metodológico y nos permitió generar un plenario final más dinámico.
Muchos fuimos los que notamos que la estructura misma de la gran sala
de conferencias donde se desarrollaron los plenarios había mutado: al
principio, las sillas estaban ubicadas como en un salón de clase, con
un podio frontal y más elevado. Luego, al final, se formaron varios
círculos durante el Mercado de Ideas, hasta llegar a un gran círculo
en el plenario final.
La sesión de clausura fue dedicada entonces al futuro. Se consideró
que no había que resolver de inmediato una fecha para una nueva
Asamblea en Asia. Quedó claro que la Asamblea no era sólo un
encuentro, un acontecimiento aislado, sino un proceso social, político
y cultural. Es necesario entonces llevar a cabo en primer lugar lo que
se ha dicho y propuesto. El futuro nos dirá cuándo y dónde organizar
la Segunda Asamblea Ciudadana en Asia. Nuestro texto final es la
compilación sintética de los informes de los talleres y tiene menos de
10 páginas. Todos los materiales escritos y visuales (fotos y videos)
estarán próximamente disponibles en el sitio web. El equipo de
facilitadores y voceros va a armar una plataforma interactiva en
internet, además de la página que ya armó Global Citizens for
Sustainable Development, para conservar los contactos y hacer circular
la información. Todos los documentos, las fotos y los videos serán
subidos próximamente al sitio de la Asamblea y difundidos a través de
Facebook, salvo en China en donde está prohibido:-(
En lo que respecta al idioma, hemos hablado en inglés. No puedo negar
que algunos acentos eran a veces difíciles de entender. Luego tuvimos
que hablar en otros dos idiomas: canarés, hablado por las comunidades
de pueblos de los alrededores de Bangalore, e hindi. Pero encontramos
de manera bastante espontánea intérpretes que nos ayudaron a entender
el “inglés asiático”. Objetivamente, el idioma no fue un problema,
tanto más cuanto que gracias a las presentaciones artísticas y las
sonrisas que nos rodeaban la comunicación era realmente agradable y
profunda.
Bueno… quería realmente contarles las sensaciones instantáneas que me
atraviesan, en este estado de emoción en el que me encuentro y que me
lleva a redactar estas líneas.
Hasta muy pronto en Aiún, y luego Iquique en el Cono Sur...
Gustavo
Un verano 2010 apasionante para Global Citizens for Sustainable Development - GCSD
Este verano fue uno de los más apasionantes para nosotros en GCSD. Un equipo internacional muy diverso trabajó en varios de nuestros proyectos de verano. Tuvimos unos cuantos proyectos y hemos subido fotos de ellos en nuestro grupo de Facebook. Aquí va un resumen:
- MALHAAR 2010: Festival del deporte y medio ambiente para niños en Bangalore (entre 6 y 14 años). Fue un programa para despertar conciencia a través de la recolección de agua de lluvia y de un torneo inter-escolar de football. CMDS sacó una publicación informativa sobre el tema e involucró más de diez escuelas en el torneo.
- Competencia Climática en el Campus (CCC): GCSD comenzó este año un programa de desarrollo liderado por jóvenes. Esta competencia permitió que los campos universitarios de Bangalore presentaran y defendieran sus propuestas; y se le entregó a seis campus una beca para implementar sus proyectos.
- CONSTRUIMOS 2010: Voluntarios de todo el mundo construyeron tres casas para familias pobres (encabezadas por mujeres). Un grupo de diseñadores, urbanistas y arquitectos australianos diseñó uno de los planes para nuestro gran proyecto: Vedike, una escuela eco-residencial, de vida mundial, y un centro de estudios. Pronto enviaremos más detalles.
- Asamblea Asiática de Jóvenes de 2010: Más de 150 jóvenes de distintas partes del mundo celebraron el Año Internacional de la Juventud, declarado por las Naciones Unidas.
- Asamblea Asiática Inter-generacional de 2010: Más de 300 participantes internacionales (jóvenes y adultos) participaron de esta asamblea para discutir temas clave, como la ecología, la ética, la equidad, la educación y la economía de la solidaridad. Los ciudadanos de Asia se imaginaban una misión y una visión comunes sobre estos temas.
- Festival de arte y cultura en la Ruta de la Seda: una fiesta de varias tradiciones y culturas, con comida, baile, música, arte y manualidades. Mostraron su arte más de 17 artistas/grupos de todas partes de Asia.
- Foro Corea-India: CMDS lanzó este año un programa para crear una plataforma para que los jóvenes de estos países compartan, dialoguen y experimenten una verdadera experiencia intercultural. Doce coreanos vinieron a la India este año y el año próximo, en julio de 2011, un grupo de doce indios viajarán a Coreo del Sur.
- Foro China-India-Corea: Este se realizó a modo de continuación de nuestro programa del Foro China-India que invita a otros compañeros/países a participar del proceso de diálogo. El Foro tuvo lugar en la Fundación de Investigación M. S. Swaminathan en Chennai y Auroville en Pondicherry.
Todo esto fue posible gracias a los grandes esfuerzos de nuestro gran equipo.
En GCSD, agradecemos a nuestro equipo y a quienes se involucraron en nuestros proyectos; reconocemos su participación activa y los grandes esfuerzos realizados para que nuestro verano fuera un éxito.
Agradecemos especialmente a:
- Lucinda Hartley y Kate Ferguson de Australia
- Sevelina Trifonova de Bulgaria
- Manuel Marín de Chile
- Miao Zhao y Zhong Yan de China
- Gabriel Marin, Jean, Pauline Zanetti, Jean-césaire Cecconi y Camille Biessy de Francia
- Asimina Patkou de Grecia
- Sangeetha Raju, Ebenezer John, Manish, Bunty, Natasha Rego, Manish, Aishwarya Krishnan, Ameetha Jayaram, Ashish John, Dhiraj John, Raju, Ashokha Varshini, Vikram Aditya, Govind Singh y Vivin Richard de la India
- Sophia Ji-hye Yoon de Corea
- May-i Fabros y Patrick Erestain de Las Filipinas
- Ewelina Dobosz y Mariusz Brzostek de Polonia
- Nicolae Axente de Portugal
- Edu Hervas y Olivia Llopart de España
- Lauren Winogran de los Estados Unidos
Mis más sinceras disculpas si he olvidado algún nombre. Al mirar hacia atrás, a nuestro verano, no podemos dejar de inspirarnos para trabajar aun más, juntos, y finalmente promover el verdadero espíritu de la ciudadanía mundial.
John Anugraha